Un incidente marítimo ocurrió frente al puerto taiwanés de Kaohsiung, donde un buque carguero llamado «Angel,» con bandera de Palau, se hundió el pasado jueves aproximadamente a cinco kilómetros de la salida del puerto. Las autoridades taiwanesas han movilizado equipos de recuperación para extraer los alrededor de 600 contenedores que transportaba el buque, según informan medios locales.
Afortunadamente, los 19 tripulantes que se encontraban a bordo lograron abandonar la embarcación utilizando botes salvavidas antes de que se hundiera.
Desde el suceso, varios departamentos y 17 embarcaciones han estado trabajando arduamente para recuperar los contenedores. Muchos de estos contenedores han sido localizados flotando en las aguas cercanas al distrito de Linyuan y al municipio de Donggang.
La Compañía Internacional de Puertos de Taiwán ha estimado que el proceso de rescate de los contenedores puede llevar entre cuatro y cinco días, dependiendo de las condiciones del mar. Sin embargo, hasta el día de hoy (sábado), solo se han recuperado 26 de ellos, mientras otros continúan bloqueando barcos pesqueros locales y causando daños a su equipamiento.
Además, otro equipo de rescate tiene programado realizar hoy una inspección del buque hundido con el objetivo de sellar los conductos conectados a los depósitos de combustible y extraerlo para evitar posibles vertidos.
Según las informaciones de la agencia CNA, se estima que el carguero contiene casi 500 toneladas métricas de combustible y 0,3 toneladas de aceite lubricante, lo que representa un riesgo potencial para el medio ambiente en caso de que se produzca un derrame.
Las autoridades y los equipos de rescate continúan trabajando arduamente para mitigar los impactos ambientales y recuperar los contenedores del buque hundido, en un esfuerzo por evitar mayores daños a la costa y la vida marina. Se espera que en los próximos días se tenga un mejor panorama sobre la magnitud del incidente y las acciones necesarias para evitar daños adicionales a la zona afectada.